Algo tiene el sonido del organista Jimmy Smith que siempre parece moderno. Al frente de su Hammond le escuchamos este clásico, Somebody Loves Me, el clásico de George Gershwin. Grabado del 11 al 13 de febrero de 1957, Smith demuestra la energía de siempre. Le acompañaban Donald Bailey en la batería y Eddie McFadden a la guitarra. Una música que no caduca. ¡Disfrútala!
Algo tiene el sonido del organista Jimmy Smith que siempre parece moderno. Al frente de su Hammond le escuchamos este clásico, Somebody Loves Me, el clásico de George Gershwin. Grabado del 11 al 13 de febrero de 1957, Smith demuestra la energía de siempre. Le acompañaban Donald Bailey en la batería y Eddie McFadden a la guitarra. Una música que no caduca. ¡Disfrútala!
Comentarios
Publicar un comentario